¿Cómo sobrevivir a la especialidad y al fellowship con hijos?
Versión Millennial
Dr. Rodrigo Castillo Iturria (CHILE)
Esp. en Córnea y Cirugía Refractiva
Clínica Oftalmológico IOARES
Hospital Barros Luco Trudeau
Hola, les quiero contar mi experiencia en la realización de la especialidad de oftalmología, (tres años) y la subespecialidad (1 año y en el extranjero).
Ingresé a la especialidad con un hijo de 14 días… Lo que se transformó en un desafío familiar y personal, por una parte uno quiere rendir y cumplir con la carga académica y por otro lado, no perder los primeros días y meses de tu primer hijo.
Mirando hacia atrás, mi hijo ya está por cumplir 6 años, pienso que lo importante fue, en primer lugar, la comunicación con mi esposa, para tener hijos se necesitan dos personas, para la realización de cualquier proyecto familiar, también!
Qué conversamos? Recuerdo de enfrentar el año como si los dos estuviéramos estudiando, vimos horarios, cursos, vacaciones, cumpleaños, etc y ordenamos el tiempo para poder cumplir en orden de importancia, primero los estudios, segundo los compromisos familiares relevantes y el resto… si alcanza, se hace.
No fue fácil, hubo semanas que no veía a mi hijo despierto durante toda la semana, ya que uno sale temprano y llega tarde, pero tenía el apoyo incondicional de mi esposa que siempre que podía me enviaba fotos y videos para que no me perdiera del día a día, a veces me pregunto ¿que hubiese sido de mi sin estos increíbles smartphones? Que en esta caso me permitían ver a mi hijo como si estuviera ahí…
Siempre quisimos como familia, vivir fuera del país, nuestros padres lo hicieron por estudios y trabajo y recuerdo que desde niño escuchaba sus historias de cuando “vivían fuera” y lo valioso de esa experiencia; por lo tanto fue un proceso lógico que ambos quisiéramos experimentar esa vida y así fue como empezamos a investigar dónde podría ser.
Cuando finalmente terminé mi residencia, vi la posibilidad de postular a una subespecialidad en México y nuevamente el apoyo familiar fue fundamental, ya que viajé por un mes a conocer el centro formador mientras dejaba a mi esposa de 34 semanas de embarazo y un niño de 3 años, incluso cabía la posibilidad de que naciera y yo no pudiese estar!!!
Hubiera sido imperdonable para mi y era un factor más de preocupación en ese delicado momento.
Durante ese mes estudié mucho y me enfoque a prepararme para el examen de admisión, la tarea era bien difícil, 6 cupos para 36 postulantes, dos de los cuales ya llevaban un año realizando otra especialidad en un área complementaria…La verdad, se veía bien difícil, pero nunca perdí la fe en mí mismo y en mi familia que me apoyaba desde Chile.
Tuve un muy buen desempeño en el examen teórico y la entrevista fue muy sincera. Era padre de un niño de 3 años y de otro pequeño en camino, esta era quizás, mi única opción de subespecializarme en el extranjero y no tenía nada que perder!
En resumen, creo que estar en pareja, formar una familia, requiere de amor, cariño y comunicación ! Tener metas comunes, conversar sin reparos en las implicancias familiares, económicas, personales, etc, permiten que uno logre las metas que, como familia se propongan.
Sin el apoyo de mi esposa, (renunció a un muy buen trabajo y se dedicó 100% a nuestros hijos mientras estuvimos en el extranjero) no hubiera sido posible realizar este proyecto.
Durante ese año conocí a muchas personas y mantengo amistad con algunas de ellas, el vivir fuera de mi país ha sido, al igual que para mis padres y suegros, la mejor experiencia que hemos tenido como familia y estoy seguro que muy pronto mis hijos comenzarán a oír las historias de cuando sus padres, “vivían afuera”.